“La libertad consiste en desarrollar el potencial que cada niño lleva dentro y no en adaptarse a una sociedad cuyas metas son otras”
Rebeca Wild: “Libertad y límites. Amor y respeto.”
Dentro de la educación respetuosa y la crianza con apego, LOS LÍMITES son un temazo en mayúsculas. ¿Límites sí o no? ¿Cómo ponerlos y mantenerlos? ¿Cuantos y cuando?… Y sobre todo: ¿Recortan los límites la libertad de las niñas y los niños?
Pese a lo controvertido y delicado de la cuestión, bien es cierto que el ser humano es gregario desde sus orígenes. Es decir, desde los principios de la historia hemos vivido en comunidad, sean cuales sean las características de la misma. Tanto en pequeños poblados nómadas como en grandes ciudades son necesarios ciertos acuerdos entre los miembros del grupo para poder convivir sin molestarnos y/o dañarnos.
Una ausencia de acuerdos suele conducir al reinado del más fuerte, mientras que un exceso de normas, sobre todo si son incoherentes o abusadoras, suelen generar un estado de tiranía y sometimiento.
Es por ello que en el equilibrio y el respeto hallamos la delgada línea que separa ambas realidades. Unos límites basados en el cuidado a un@ mismo, a l@s demás personas y al entorno son unos limites elementales y , generalmente, sencillos de comprender para cualquier persona que viva en sociedad.
Cuando una niña llega por primera vez a un espacio externo al hogar, como puede ser un Aula de infantil, está explorando un mundo nuevo y desconocido, lleno de emocionantes tesoros por descubrir, pero también de personas y cosas extrañas, y algunas veces, atemorizantes. La existencia de límites proporciona seguridad. Si yo no puedo ir por ahí aporreando a las demás personas, tengo la certeza, de alguna manera, que el resto de las personas tampoco pueden aporrearme a mí. Y eso, con tres años, da mucha, mucha tranquilidad.
Si yo asumo la responsabilidad de cuidar el material que hay en un espacio, tengo, de alguna forma, la “garantía” de que las demás personas harán lo mismo, y eso asegura que cuando yo quiera utilizar algún elemento es probable que lo encuentre en el mismo lugar y el mismo estado que yo lo dejé. Y eso, también, proporciona mucha tranquilidad.
Es verdad, que en lo referente a la infancia, muchas veces y en muchos espacios, los límites se establecen desde arriba y en defensa de necesidades adultas. La mayor parte de las ciudades se diseñan y organizan de una manera que no prioriza en absoluto aquello que facilita el desarrollo de la infancia. Pequeños parques “amurallados” y categorizados por edades, aceras intransitables, tráfico peligroso en casi todas las partes de la ciudad, transporte público pensado mayoritariamente para personas de gran tamaño y mobiliario urbano impracticable. Existen muy pocos lugares en la ciudad donde las niñas y los niños puedan Ser, de verdad; donde puedan moverse libremente sin miedo, donde puedan explorar y desarrollar sus variadas tendencias al movimiento.
Y más allá de la propia estructura de la urbe, son muchos los lugares, incluso pensados para la propia infancia, como centros educactivos y de ocio infantil, plagados de normas que solo se justifican desde una óptica adulta: Parques donde no se puede jugar a la pelota, recreos donde está prohibido pintar, guarderías donde se obliga a dormir al siesta a una hora determinada aunque no tengas sueño, centros de juego donde no se puede gritar…
Educar no significa domesticar, y para que una criatura interiorize de verdad los límites, éstos deben ser comprensibles y sensatos. No se trata de conseguir que los niños y las niñas se conviertan en una presencia dócil y silenciosa dentro de la sociedad, sino de que sean capaces de convivir en armonía respetando a las personas que tienen cerca, al entorno que les rodea, y por supuesto, a sí mismas.
Como dice Rebeca Wild, cuya lectura recomendamos encarecidamente, ya que ilustra de manera magnífica todo este tema:
«Para que esa libertad con limites se pueda dar hace falta un ambiente adecuado donde poder saltar, pintarrajear, golpear, porque ésta es su manera de entenderse a sí mismo y el entorno”.
Rebeca Wild
En definitivas cuentas, unos límites establecidos desde el amor y el cuidado acotan el inabarcable mundo exterior, y proporcionan seguridad y tranquilidad, contribuyendo a que la vida colectiva esté basada en el respeto y en la convivencia pacífica. Y desde edades bastante tempranas, estos límites no tienen porqué venir impuestos, sino que pueden consensuarse de manera dialogada. Las niñas y niños que han sido respetadas desde su nacimiento, suelen mostrar una tendencia natural a respetar a su vez, y suelen buscar acuerdos y normas que se basen en esta lógica de cuidar y cuidarnos.
Asique si lo hacemos con cariño, probablemente pronto descubriremos que, como adultas, no estamos solas en esta tarea de marcas límites y hacerlos comprender, sino que responden a un flujo orgánico derivado de la comprensión y el apoyo mutuo en los espacios colectivos, bien sea el hogar, el aula o la comunidad.
Curso gratuito sobre Libertad y Limites con Colette Chaumier.
Esta semana podemos seguir navegando en este tema de la mano de Colette Chaumier.
Colette es maestra de infantil y primaria y ha trabajado durante 15 años en la Escuela Pública en Francia (infantil, primaria y clase unitaria). Ha tenido oportunidades de acercarse a la pedagogía Freinet, llevándola a la práctica en distintas situaciones.
En 2006 fundó la escuela Montessori «La Casa verde» junto con una asociación de madres y padres. Un espacio educativo rural en la provincia de Málaga en el que ha acompañando, durante 8 años, niñas y niños de 3 a 6 años.
Coletet encontró su vocación en la difusión de la pedagogía Montessori, en compartir lo que había aprendido y puesto en practica en la escuela.
Ha tenido la suerte de poder asistir a algunos cursos de Mauricio y Rebeca Wild en España (Experiencia de escuela libre Pestalozzi en Ecuador) y se ha formado en la escucha activa y a la comunicación no violenta. Puedes encontrar más información sobre ella y los cursos que imparte en: https://www.compartiendomontessori.es
Y si tienes interés en realizar su curso en linea gratis sobre “Libertad y límites” solo tienes que registrarte en el Aula Virtual de la Organización Internacional Montessori Canela, a partir del martes 30 de junio. Estará disponible durante una semana. Puedes acceder desde aquí: https://montessoricanela.com
Ya lo sabes, Montessori Canela, siermpre a tu lado en el camino de la formación. Construyendo juntas un entorno educativo de respeto y de paz.