El Ambiente Preparado es todo aquel espacio (físico y psíquico) donde se desarrolla el ser humano. Específicamente, en las escuelas, hablamos de ambiente preparado interior (aulas), intermedio (pasillos y terrazas) y exterior (patios) para diseñar e implementar cada uno de esos espacios cuidando responder a las necesidades biológicas y psíquicas de cada miembro de la comunidad (estudiantes).
El ambiente preparado físico se refiere a todo el mobiliario, distribución en el espacio y propuestas que favorecen el aprendizaje desde el paso del pensamiento concreto a la abstracción.
El ambiente preparado psíquico se refiere a todo el ámbito emocional que es esencial para el aprendizaje, y por tanto, también se debe cuidar y favorecer en el quehacer pedagógico cotidiano.
Por ello son espacios bellos, estéticamente éticos, simples, que transmiten esa sensación de calor de hogar. Son funcionales, espacios prácticos y armoniosos que favorecen el aprendizaje individual y colectivo.